Consejos para reducir el absentismo laboral
Consejos para reducir el absentismo laboral
El absentismo laboral es un problema para las empresas. Se define como la ausencia o abandono del puesto de trabajo dentro de las horas que corresponden a la jornada laboral, ya sea de forma justificada o injustificada. Supone unos costes elevados para la empresa, además del perjuicio claro en cuanto a productividad.
El absentismo justificado es el que se da cuando la empresa está advertida de la ausencia del trabajador (por ejemplo, por baja médica), mientras que el no justificado es el más pernicioso para la empresa, puesto que el trabajador está ausente sin aviso previo, y por supuesto sin autorización. Un tercer tipo de absentismo es el virtual, que es el que se da cuando un trabajador emplea parte del tiempo de su jornada laboral en realizar tareas ajenas a su puesto.
¿Cómo se puede evitar el absentismo laboral, o reducirlo en la medida de lo posible?
El primer paso para reducir el absentismo laboral es disponer de la mayor cantidad de información sobre todas las ausencias registradas, tanto justificadas como injustificadas. De esta manera se podrán establecer patrones o descubrir las causas fundamentales de las ausencias al trabajo. Con esto en la mano, buscar las soluciones y realizar acciones orientadas a solventar el problema estará a nuestro alcance.
Podemos identificar cinco grandes áreas que sirven para reducir el absentismo: mantener una comunicación interna adecuada, establecer objetivos consensuados, medir la implicación y los resultados de los trabajadores, el reconocimiento de los logros y las medidas de conciliación laboral. Trabajar en ellas conseguirá crear un entorno corporativo favorable en el que se reduzcan, o eliminen, las condiciones que generan absentismo laboral.
¿Qué acciones específicas podemos poner en marcha para reducir este problema?
- Adaptar el trabajo a las personas, repartiendo la carga de trabajo de manera que todos los empleados rindan por igual en sus capacidades.
- Promover hábitos de vida y trabajo saludables.
- Ofrecer la posibilidad de realizar jornada continua o adaptada a las necesidades del trabajador. Relacionado con esto, y dependiendo del empleo en concreto, el teletrabajo es una manera de premiar al trabajador dándole flexibilidad y la posibilidad de conciliar su vida personal con la laboral.
- Racionalizar los horarios, diseñándolos de manera que las jornadas sean más productivas y el trabajador disponga de más tiempo personal.
- Políticas de turnos consensuadas con la plantilla.
- Establecer programas de formación que permitan a los trabajadores desarrollar su carrera profesional con todas las herramientas posibles a su alcance.
- Diseñar planes de incentivación y motivación, aumentar la participación y la colaboración de los trabajadores.
- Ofrecer un feedback de las tareas y el rendimiento del trabajador preciso y oportuno.
Como vemos, proporcionar al trabajador un entorno adecuado y amable con sus necesidades es positivo para reducir el absentismo laboral. Hacer del puesto de trabajo un lugar acogedor es fundamental para motivar a las personas, de la misma manera que lo es proporcionarles las herramientas que necesitan para desarrollar sus aptitudes o conciliar su vida laboral con la familiar.
En el terreno laboral, adoptar nuevas tecnologías (almacenamiento en la nube, por ejemplo) que faciliten el teletrabajo, promover el trabajo por objetivos, recompensar la presencia con incentivos tangibles (descuentos en la cafetería o salas de descanso) u organizar eventos participativos se revelan como estrategias positivas que aumentan la motivación y el rendimiento de los trabajadores.