El absentismo laboral: un problema para todas las empresas

El absentismo laboral es, por definición, “la no asistencia al trabajo por parte de un empleado que se pensaba iba a asistir”. Esta no asistencia se puede deber a múltiples motivos, algunos de los cuales están justificados de alguna manera reconocida en el contrato de trabajo, e incluso remunerada (el ejemplo más claro son las vacaciones), pero otros motivos no tienen justificación, ni remuneración, y suponen un gran problema a las empresas porque su producción se resiente. En los dos últimos años, el absentismo laboral ha aumentado en un 5%.

Los costes del absentismo laboral para las empresas

En caso de absentismo laboral, y dependiendo de la causa que lo provoque, los costes para empresas y empleados son elevados. La Incapacidad Temporal certificada por un médico es la causa más común de absentismo laboral, suponiendo el 75% de todas las ausencias. Esta incapacidad temporal es el fruto de combinar las incapacidades por contingencias comunes (enfermedades) y las contingencias profesionales (accidentes laborales, por ejemplo), y de entre las dos posibilidades la que más absentismo provoca es la primera.
Las enfermedades comunes (gripe, jaqueca, faringitis, depresión…) suponen un coste elevado para la Seguridad Social, la empresa y la economía en general, incluyendo a la del propio afectado por la enfermedad, y solo en 2017 el coste fue de 76.751 millones de euros en España, un crecimiento de más de 22.000 millones de euros desde 2013.

Desde el punto de vista de las empresas, los costes son muy elevados, unos 6.273 millones de euros en 2017, frente a los 6.614 millones que ha costado a la Seguridad Social y los 63.863 millones que se estima se dejaron de prestar o producir en bienes y servicios por las bajas laborales.
Los datos de absentismo del pasado año son muy reveladores: la suma de las horas perdidas equivale a que 920.000 trabajadores en todo el país dejasen de ir a trabajar durante todo el año. Cada baja laboral registrada tiene una media de 40 días de duración.

Incapacidad temporal, ¿por qué debe preocuparnos?

La incapacidad temporal es, como hemos dicho, la causa principal de absentismo laboral en España. No es la única, como se recoge en este cuadro elaborado por MC Mutual:

Suponiendo una proporción tan importante de bajas laborales, la incapacidad temporal es a la que hay que dedicarle mayor atención. De hecho, entendemos que una baja se encuadra en la IT cuando se trata de una contingencia común (enfermedad común o accidente no laboral), o una contingencia profesional (accidentes de trabajo, o enfermedades derivadas de la profesión).
La principal razón por la que nos debe preocupar el absentismo laboral por IT es simple: a medida que mejora la economía y hay más trabajo disponible, aumenta el absentismo. Según Cepyme, el absentismo laboral y su crecimiento a lo largo de los últimos años tienen dos razones fundamentales: el aumento del número de trabajadores y una menor preocupación por perder el empleo tras una baja.
La primera razón es puramente estadística: si aumenta el empleo, aumentan las bajas laborales. La segunda razón se debe a la sensación de seguridad que experimenta el trabajador en un escenario de mejoría económica, pues cuando hay más posibilidades de empleo y la economía crece, más absentismo se da. Al contrario, en épocas de recesión o de crisis, disminuye el absentismo laboral.
En ese sentido, conviene tener en cuenta los costes que suponen las bajas laborales para las pequeñas y medianas empresas, sobre todo, ya que tendrán un impacto negativo en la productividad y, por tanto, en los beneficios y el crecimiento de la empresa. Entre las posibles soluciones al absentismo laboral destacaría la de racionalizar los horarios laborales y poner en marcha iniciativas de flexibilidad horaria que facilitan la conciliación de vida laboral y personal, y además aumentan la motivación y la productividad del empleado.